ya son treinta y uno

domingo, marzo 26, 2006

¿SALIMOS O ANDAMOS?

Bueno, bueno, quizá ya lo sabíamos pero fue duro reconocerlo. Resulta que El Chico PR regresó el viernes de su viaje por otras tierras y para el sábado a las 6 de la tarde, seguía sin dar señales de vida. Aceptándo que soy una histérica desesperada, no pude hacer menos que llamarlo para armar el plan de sábado. Contestó lindo, amable y disponible como siempre pero cansado y ya con planes. Ahí empezó mi último drama.
Al colgar torturé a La Mejor Amiga con preguntas sobre mi estatus: ¿salimos o andamos?. Admitamos que mi razonamiento es muy básico y femenino, si el estatus es el primero ¿pa' que jodidos le hacemos tanto al cuento de la exclusividad? ¿y si es el segundo por qué no estoy considerada en sus planes?
En fin, entre mal cine y muchos cafés La Mejor Amiga terminó por apoyar al Chico PR jurándo que lo que yo necesito es aprender el dificil arte de la paciencia. Quizá tenga razón. Cuando la última esperanza se había perdido, el susodichó llamó y alteró sus planes debido al trabajo que no lo suelta ni un segundo. Más tranquila, decidí que llegó la hora de relajarme y pasármela bien, con una botella de buen tinto, en la recámara de La Mejor Amiga y con los mejores capítulos de Friends en la televisión.
Según nuestras agendas, quizá por ahí del martes tendremos un segundo libre para darnos besos. Y según mis últimas meditaciones, es hora de despabilarnos. Suficiente tiempo -dos meses con sus dias y noches- invertido en un chicuelo que nos mueve el corazoncito pero que no terminar por aclararnos la incógnita.
Mientras tanto, no tengo intenciones de salir corriendo a comerme a besos al primer candidato que se nos ponga enfrente. Pero tampoco pienso pasarme más tiempo tristeando. Sobre todo, porque en el horizonte se vislumbran buenas compañías -y ninguna de ellas es el regreso a Islerodemiura.

Aunque los contratiempos no terminan: la rodilla sigue dando molestias y la distancia continúa con La Jefa que no sé cómo se convirtió en una típica Mamá Repleta de Quejas, mi ánimo va de subida.
Tengo en planes una cita con El Señor de los Caballos apenas vuelva de su viaje por tierras chilenas, tengo toda la intención de postularme para el proyecto África que ya les contaré en su momento -no vaya a ser que se me caiga por andarlo contando antes de tiempo- y por si fuera poco, reapareció el Peluquero Estrella y de Cabecera y La Señora Deportes de Garibay a los que juré organizar para encontrarnos el miércoles con La Señorita de las Finanzas, hoy convertida en la nueva Niña del Coaching. Quién por cierto, como suele hacerlo, logró darle varias respuestas a mi destartalada vida laboral y financiera. Gracias a sus buenas ideas, en el horizonte se vislumbra 'La' oportunidad de reformar mi economía -por estos dias ahogada en la peor crisis de mi historia-.
¿Era hora no?

la que escribe Bridget Jo :: 22:43 :: 11 Le entran al cuento:

Poniendole de su cosecha

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